El Valencia arrancó una temporada ilusionante con un empate ante la Real Sociedad en Mestalla (1-1), en un encuentro que dejó buenas sensaciones pese a no lograr la victoria, pero que también sirve para darse cuenta del trabajo que hay que hacer en lo que queda de mercado.

El equipo de Carlos Corberán confirmó las expectativas generadas durante el verano con una actuación competitiva y un estilo reconocible, especialmente en la seegunda parte. El regreso de la Curva Nord como grada de animación y la vuelta de Gonçalo Guedes a Mestalla, aunque desde el banquillo rival, completaban el contexto emotivo de la noche.

Corberán apostó por el mismo once que una semana antes había derrotado al Torino en el Trofeu Taronja, pero los primeros compases del partido estuvieron marcados por el dominio visitante. La Real Sociedad impuso su ritmo en la medular, recuperando rá...

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