Lo sucedido el 22 de junio de 2024 en el Nou Estadi ya forma parte de las páginas más crueles del libro de la historia del Nàstic. El equipo grana se quedó a las puertas del ascenso a Segunda División. Un gol de Antoñito para el Málaga, en la última jugada y tras un arbitraje muy polémico de Eder Mallo Fernández, dejó a los granas sin gloria.

De aquello ha pasado ya una semana y no queda otra que pasar página. El tiempo dirá en qué queda la denuncia de la entidad tarraconense contra el colegiado vasco por negligencia. Mientras, hay una nueva temporada que ya se vislumbra en el horizonte. El fin de semana del 24-25 de agosto es la fecha fijada para el arranque de la que será la cuarta temporada de la Primera RFEF bajo ese formato y ese nombre. Menos de dos meses, pero hasta entonces, al Nàstic le quedan muchas novedades...

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