El viento acechó fuerte durante todo el partido y deslució un juego en el que el balón, por momentos, fue loco en los primeros compases. Ambos equipos, bien posicionados en defensa en el primer periodo, impidieron que las jugadas de ataque se acumularan en ambas áreas y que las porteras tuviesen mucho trabajo. La del Tavernes despejó casi desde el suelo un balón colgado por Nerea que nadie pudo rematar. Por su parte, Meritxell solo tuvo dos intervenciones: una en otro balón parado que las visitantes lanzaron de forma directa...
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