Pocas veces se habrá producido una victoria de un equipo de LaLiga con tanto acento jiennense. El Real Valladolid se llevó los tres puntos ante el Espanyol en un duelo ante uno de sus rivales directos por la permanencia.

Y lo hizo gracias a dos goles con denominación de origen de la provincia de Jaén. Primero Iván Sánchez abría la lata en la primera mitad y, ya en el segundo periodo, Aguado encarrilaba la victoria pucelana.

Planteaba Pacheta hasta cinco cambios en su once inicial respecto a la anterior jornada. Uno de los que se mantuvo en el equipo inicial fue Iván Sánchez, que respondió a la confianza de su entrenador con un buen partido.

El de Campillo de Arenas destiló la calidad que atesoran sus botas. Estuvo muy activo durante el tiempo que se mantuvo sobre el terreno de juego, participando en todos los frentes y asumiendo galones.

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